Fecha: 09/Dic/2022
Fuente: https://www.eltiempo.com/
La Dermatitis Atópica, es una enfermedad inflamatoria crónica de la piel, que afecta no sólo físicamente sino emocional y socialmente a las personas que la padecen.
De acuerdo con el Instituto Nacional de Seguridad y Salud en el Trabajo de España, INSST, la piel humana funciona como una barrera flexible, gracias a los componentes de colágeno y elásticos de la dermis, esta se encarga de proporcionar un escudo o defensa única que protege, dentro de ciertos límites, frente a las fuerzas mecánicas y a la impregnación de diversos agentes químicos.
Adicional a esto, la piel controla la pérdida de agua del organismo y lo protege contra los efectos de la luz natural y artificial, así como del calor y del frío. Es por esto que, la piel intacta y sus secreciones, constituyen una barrera defensiva bastante eficaz frente a los microorganismos.
La Dermatitis Atópica, que a menudo se conoce como eczema, es una enfermedad crónica -de larga duración- que hace que la piel se inflame e irrite, lo que causa mucha picazón. Esta afección es frecuente y puede presentarse a cualquier edad, sin embargo, por lo general comienza en la infancia, así lo indica, el Instituto Nacional de Artritis y Enfermedades Musculoesqueléticas y de la Piel del Departamento de Salud y Servicios Humanos de los Estados Unidos.
La doctora Claudia Marcela Arenas Soto, dermatóloga, vicepresidente de la Asociación Colombiana de Dermatología, delegada en Colombia del Colegio Ibero-Latinoamericano de Dermatología 2022- 2024, afirma que “la dermatitis atópica, es una enfermedad inflamatoria crónica, recurrente, heterogénea y multifactorial, que incluye factores genéticos y ambientales como la polución, agentes irritantes, alérgenos ambientales, entre otros”. De igual manera, recalca la especialista que, “en Colombia, la prevalencia aproximada de personas con dermatitis atópica es de 9% en adultos y 12% en adolescentes”.
Lo cierto es que cada caso de dermatitis atópica debe ser tratado particularmente por un médico, profesional de la salud y especialista en dermatología. Sin embargo, como medida inmediata ante una crisis por dermatitis, los especialistas suelen acudir a los siguientes métodos:
- Los antihistamínicos (en especial, los que causan somnolencia), que controlan el picor y facilitan el sueño.
- Algunos inmunomoduladores tópicos. Los inmunomoduladores controlan la respuesta inmunológica origen de todas las manifestaciones del eccema.
- Los antibióticos(especialmente aquellos específicos para S. Aureus, una bacteria muy frecuente en la piel) pueden ser de gran utilidad en el control de los brotes, en especial si están claramente infectados.
- Algunas veces se debe recurrir a otros inmunomoduladorespor vía oral solo en casos de máxima necesidad, especialmente debido a la rebeldía del eccema.
- Para pacientes mayores de trece años, existe la posibilidad de fototerapia (tratamiento con luz), que ha demostrado una gran mejoría en los brotes.
Cabe destacar, que esta enfermedad supone una carga para los pacientes a nivel físico, psicológico y mental, pues el prurito intenso, persistente y debilitante, signo característico de esta afección, puede provocar alteración del sueño, ansiedad, depresión, ideación suicida, trastornos de atención (déficit de atención o hiperactividad), deterioro de la calidad de vida y reducción de la productividad.
Contáctenos en: Dirección: Calle 70 # 9-10 Bogotá D.C – Teléfono: (571) 312 73 93 – Email: portal@aciem.org